A mediados del siglo XIX, Don Bosco, introdujo la práctica del teatro entre los jóvenes como una herramienta invalorable de enseñanza.
Lo interesante es que preparó un reglamento para dicha actividad conocido como Reglas para el Pequeño Teatro, y que, desde nuestro grupo, La Sociedad de la Alegría hemos seguido y disfrutado, entre otras:
La finalidad del Pequeño Teatro es regocijar, educar e instruir moralmente a los jóvenes en la mayor medida posible.
- Procúrese que las composiciones sean amenas y aptas para recrear y divertir, pero siempre instructivas, morales y breves.
- Evítense aquellas composiciones que representen actos atroces, expresiones poco cristianas y vocablos groseros o vulgares.
- Procurar vestuarios de poco costo.
- Que nadie vaya a cenar aparte; que no se den premios, señales de estima o elogios a aquellos que sean favorecidos por Dios con aquellas aptitudes para representar, cantar o ejecutar. Ellos ya son premiados con el tiempo que se les deja libre, y con las lecciones que se dan en su beneficio.
El argumento de la obra es el siguiente:
Els xiquets ja no lligen llibres, no estimen la lectura. I si no es posa remei, els personatges de la literatura cauran en l’oblit i desapareixeran per a sempre. Així, uns fascinants personatges de llibres i contes intentaran convéncer a una xiqueta de que llegir és divertit. Però no serà tan fàcil, personatges del cinema o els videojocs tractaran d’impedir-ho. La batalla entre personatges fantàstics està servida. Conseguiran salvar el món de la literatura?
Con esta idea, los chicos y chicas de 4º se animaron a aprender mediante la realización de esta obra. El resultado, espectacular, el grupo clase, más unido que nunca, y las familias; esperamos lo disfruten igual o más que nosotros.
