¿A quién no le gustaría vivir para siempre? Mejor aún, ¿a quién no le gustaría vivir para siempre, rodeado de los suyos y sin problemas, ni angustias, dolor, miedos o preocupaciones? ¿Y si no fuera un sueño? ¿Y si fuera posible??? ¡¡¡Pues lo es!!! ¡¡¡Y es lo que celebramos en la Semana Santa y en la Pascua de Resurrección!!! Celebramos que nuestra vida es ETERNA y que un día viviremos todos juntos en un verdadero PARAÍSO, y no solo eso, sino algo todavía más importante, que el Paraíso podemos empezar a disfrutarlo YA en la tierra.

Esto, es lo que descubrió Madre Mazzarello hace 150 años, que hay una FELICIDAD distinta a la que ofrece el mundo, una ALEGRÍA que no acaba nunca y una ESPERANZA que hace nuevas todas las cosas, y TODO esto lo regala DIOS a aquellos que se atreven a CONFIAR en Él.

Main confió en Jesús; le contaba sus cosas, le compartía sus miedos y sus dudas, le gustaba pasar largos ratos con Él en el silencio de su oración, le proponía sus proyectos y le encantaba escuchar los Suyos, descubrir como su Amor le iba cambiando el corazón haciéndolo sencillo, fuerte, valiente, fiel, osado para entregar su vida al mundo por Él.

¡¡¡Y qué fuerza tiene la vida de las personas que se fían de Jesús!!! Que 150 años más tarde, todos queremos ser Mornese, queremos vivir de ese Espíritu, mostrarle esa Alegría al mundo y participar de esa misma misión de llevar a Jesús a los jóvenes.

Estos días celebramos que Jesús murió y el Padre lo resucitó para mostrarnos que seremos ETERNOS y que nos dejó su ESPÍRITU para poder, si le dejamos, empezar a vivir el CIELO estando aún en la tierra, haciéndonos capaces de AMAR sin límites, PERDONAR sin límites y dotar de sentido el SUFRIMIENTO. ¿No te gustaría vivir así?

FELIZ SEMANA SANTA Y FELIZ PASCUA DE RESURRECCIÓN